POR QUE VISION DE FUTURO?

Con el fin de conocer las ideas, visión y necesidades de todos los Ingenieros y Arquitectos, en el CENTRO DE INGENIEROS DEL ESTADO MERIDA. En esta hoja recogeremos Toda sugerencia que esten acorde al nivel del requerimiento actual y con la VISION DE FUTURO. Obligante en las actividades del día a día, haciendose indispensable que todos nosotros busquemos la solución para el bienestar y calidad de vida que tanto nos merecemos.

LA SOLUCION ESTA EN NUESTRAS MANOS

ALGUNAS IDEAS POSIBLES Y REALES PARA EL CIEM

.- Sistematización y automatización de los procesos administrativos.
.- Sistematización de los archivos y expedientes de los agremiados para la prestacion de un mejor sevicio personalizado.
.- Creación de la pagina Web, para mejorar la informacion pertinente para el agremiado.
.- Automatización de la oficina de Ocepro, para mejorar el servicio prestado.
.- Creación de la biblioteca virtual expecializada.
.- Busqueda de descuentos en computadoras, software, linea blanca, TV y equipos electronicos para los agremiados solventes.
.- Convenio con diferentes entes dentro y fuera del estado, para que atravez de la Fundacion de Mejoramiento Profesional se dicten Diplomados de expecialización.
.- Pagos de centro a travez de internet.
.- Reuniones de Directiva por lo menos una (01) vez al mes, en espacio abierto, para conocer y recibir propuestas, recomendaciones y proyectos de los agremiados como de la Seccional.
.- Crear un vinculo via internet con la Seccional, dando la oportunidad a esta de mayor enlance con el Centro.
.- Creacion de una oficina par asesoramiento de Estudios y Proyecto auto gestionable, para obtención de recursos para ayuda del Centro y Fundaciones.
.- Zona wifi para todos los agremiados gratis.

martes, 27 de abril de 2010

POR QUE CELEBRAMOS EL 4 DE JULIO EL DIA DEL ARQUITECTO

Allá por el año 1940, se reunían en algunas de las fuentes de soda de Caracas, los hombres de negocio, las damas de la sociedad y en general el público sin prisa que transitaba las angostas calles de la plácida ciudad de los techos rojos. Entre los asiduos concurrentes a las tertulias vespertinas de aquellas cafeterías con sus viejos mostradores, que tras las puertecitas de tela metálica almacenaban las pastas y los dulces criollos y uno que otro quesillo, protegidos de las moscas impertinentes por un ventilador con multicolores tiritas de papel, se encontraban cuatro o cinco hombres jóvenes, profesionales de la arquitectura. Sus nombres: Carlos Raúl Villanueva, Rafael Bergamín, Heriberto González Méndez, Roberto Henríquez...
Solían reunirse estos amigos informalmente, con el fin de intercambiar ideas sobre la reglamentación del ejercicio de la profesión en Venezuela.
Ocasionalmente consideraban las posibilidades de fundar una asociación, con el objeto de agrupar a los arquitectos y a tal fin convocaron a varios colegas a una reunión. En esta reunión que vino a cristalizar en el año 1945, un núcleo de profesionales, exactamente siete, suscribieron un acta que dice textualmente: “En Caracas, a los cuatro días del mes de julio de mil novecientos cuarenta y cinco, reunidos en el edificio del Colegio de Ingenieros de Venezuela, los abajo firmantes fundamos la Sociedad Venezolana de Arquitectos, cuyos fines serán: dar impulso al estudio y desarrollo de la Arquitectura, cultivar la ética profesional, establecer vínculos de unión entre sus miembros y propender a la defensa del mejoramiento de la profesión”. Este documento fue firmado por los ya mencionados arquitectos junto con los doctores Luis Eduardo Chataing, Cipriano Domínguez y Enrique García Maldonado.
Una vez fundada la Sociedad Venezolana de Arquitectos, SVA, los inquietos representantes de la arquitectura seguían frecuentándose, ya no para la tertulia del café y el simple cruce de ideas, sino en forma regular y con el firme propósito de llevar a cabo los postulados del Acta de Fundación de la SVA. Una de las tareas fundamentales era la aplicación del grupo para el mejor desarrollo de las actividades.
Entusiasmados, acudieron a la recién fundada sociedad nuevos miembros, entre los que podemos citar a Gustavo Guinand, Pardo Soublette, Mujica Millán, Seijas Cook y Gustavo Wallis.
El segundo paso decisivo fue la constitución legal de la sociedad, acto que se realizó el 15 de abril de 1946. El documento quedó debidamente registrado por ante la Oficina de Registro Público y con ello la Sociedad adquirió personalidad jurídica. Así comienzan las actividades de los arquitectos venezolanos, ya legalmente agrupados en un organismo impulsado por la mística profesional como norte de sus acciones. Ese memorable día, 15 de abril de 1.946, se procedió al nombramiento de la primera junta directiva 1946-47. la cual quedó constituida así: Presidente: Carlos Raúl Villanueva, Vicepresidente: Luis Eduardo Chataing, Secretario: Heriberto González Méndez, no nombramos vocales ni suplentes porque no hubiéramos quedado sin miembros...
A partir de esa fecha, la SVA, comienza a desplegar una intensa labor, tendente a cumplir cabalmente con los propósitos enumerados en su Acta Constitutiva y dispuesta a colaborar al engrandecimiento del país. Una vez establecidos los contactos necesarios, la SVA, procedió a ofrecer sus servicios a las autoridades municipales y nacionales en todo lo relacionado con orientación profesional y soluciones a los problemas que afectaban en una u otra forma la vida ciudadana. Ardua tarea en su comienzo, como es natural suponerlo, no logra sin embargo, desanimar a los integrantes de la naciente asociación.
Entre los primeros éxitos alcanzados podríamos citar la creación de la Escuela de Arquitectura, dependiente de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Central de Venezuela. El funcionamiento de la Escuela era, al principio, bastante irregular, en el sentido de que había que compaginar el pensum de la carrera con los establecidos en Ingeniería, de tal suerte que los estudiantes pasaban unos años en Arquitectura y otros en Ingeniería. No obstante estas dificultades iniciales, las promociones que egresaban de la UCV, contaban con muchos profesionales que dentro de breve tiempo se iban a convertir en destacados intérprete de las más modernas y audaces corrientes artísticas dentro de los diferentes aspectos del arte arquitectónico universal.
En 1946 los arquitectos venezolanos logran participación en el Congreso Panamericano de Arquitectura, realizado en Lima y a partir de esa fecha han seguido actuando en dichos congresos.
Siempre por iniciativa de la SVA se consigue, por intervención directa ante el Presidente, don Rómulo Gallegos cuya humana compresión de los problemas nacionales facilito en alto grado la realización del proyecto, la creación de la Dirección Nacional de Planificación con carácter autónomo.
Los frutos de dicha empresa son bastante conocidos por profesionales y público en general.
En 1945 es elegida la ciudad de Caracas como sede para el 9º Congreso Panamericano de Arquitectura. En las deliberaciones se incluye la intervención de la Sociedad Venezolana de Arquitectos a la Federación Panamericana de Asociaciones de Arquitectos FPAA, de la cual fueron designados delegado principal, Gustavo Wallis y delegado suplente Cipriano Domínguez.

Y POR QUE EL 28 DE OCTUBRE EL DIA DEL INGENIERO

A mediados del siglo XVIII llegan a Venezuela los primeros ingenieros, nombre que se daba en España a los especialistas en técnicas militares al servicio de la corona. Construirán y remodelarán instalaciones para la defensa del poderío colonial en la Capitanía General, que empieza a ganar importancia política, demográfica y económica gracias a las exportaciones de cacao (Theobroma o alimento de los dioses).
En 1760 Nicolás de Castro, oficial español, de servicio en Caracas solicita y obtiene licencia real para fundar en Caracas una Academia de Geometría y Fortificaciones destinada a formar personal militar. Esta Academia funciona hasta el año1768.
Posteriormente en 1808 José Mires establece una Academia de Matemáticas en Caracas y Tomas Pires establece otra en Cumana, destinadas estas a formar militares. En ambas estudia el joven Antonio José de Sucre. Debemos resaltar que el máximo galardón que otorga el Colegio de Ingenieros de Venezuela a sus miembros mas distinguidos lleva el nombre de Ing Antonio José de Sucre Gran Mariscal de Ayacucho.
Bajo la dirección de Juan Manuel Cajigal, venezolano insigne que se había formado como matemático e ingeniero militar en Francia y España, se funda en 1831 la Academia de Matemáticas que aceptara alumnos civiles que podrán optar al titulo de agrimensores después de tres anos de estudios; mientras que los militares podrán alcanzar el titulo de ingeniero en 6 años.
En 1845 se construye la primera obra de ingeniería vial del país, el camino entre Caracas y la Guaira y en 1857 entra en operación el primer ferrocarril de Venezuela, entre Minas de Aroa y Tucacas, el cual fue construido por la compañía inglesa que explotaba los yacimientos de cobre en la región.
Un hito importante ocurre mientras se desarrollaba la guerra federal en el país, pues se funda en Caracas el 28 de Octubre de 1861, el Colegio de Ingenieros de Venezuela (CIV), en calidad de dependencia del Ministerio de Guerra con funciones solamente técnicas y consultivas Asamblea en la que 22 profesionales suscribieron el Acta Constitutiva en el viejo Colegio de Santa María de Caracas miembros inscritos. Esta importante institución será adscrita posteriormente al Ministerio de Educación.
Ya con anterioridad se había inscrito en la historia de Venezuela con la actuación de hombres como Antonio José de Sucre , Gran Mariscal de Ayacucho, Ingeniero Militar y Protagonista importante de la gesta emancipadora; Juan Manuel Cajigal pionero de las Ciencias Físicas y Matemáticas y forjador de la Primera Promoción de Ingenieros de la Republica, entre quienes figuraron: Rafael María Baralt, Manuel Mariah Urbaneja, Olegario Meneses y el primer presidente del Colegio de Ingenieros de Venezuela Juan José Aguerrevere
En 1922, por iniciativa de Germán Jiménez, para la fecha presidente del CIV, se promulga la Primera Ley de Ejercicio de la Ingeniería del país.
No podemos dejar de mencionar que la Asamblea Nacional está analizando un nuevo texto de Ley. Debemos mantenernos atentos a este hecho para que no amenaze la integridad de nuestra institución gremial